Hoy los alumnos y profesores se han pasado de "a raia", literalmente, y a cruzando a pie el puente internacional han llegado a Tui.
Una vez allí realizaron una visita a la catedral y subieron a sus tejados, unos con más vértigo que otros. El esfuerzo mereció la pena porque las vistas eran espectaculares.
Al final tuvieron la ceremonia de despedida, con la entrega de los certificados correspondientes, incluyendo la degustación de una tarta.
Por la tarde cogieron el bus para reunirse con el resto de alumnos españoles y otra delegación de 6 alumnos franceses acompañados por Marta y Stephan para empezar la última movilidad del proyecto en Lucus Augusti.
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